sábado, 2 de julio de 2011

Pride

La moda viene y va. Dicen que es cíclica, que lo que se llevó hace 50 años antes o después se volverá a llevar.

La moda es, en muchas cosas, como el Arte. Hace unos siglos un estilo artístico se desarrollaba en un punto geográfico concreto, donde se hacía fuerte y desvancaba al estilo paradigmático del momento. Después se extendía por el resto del continente y así una vez tras otra, un estilo tras otro. Lo mismo pasaba con la moda. Cuando se empezaron a llevar las minifaldas, los pantalones en las mujeres, el maquillaje sí, el maquillaje no... tardó en asentarse y extenderse.


 
Hoy en día las barreras geográficas y temporales del asentamiento de cualquier tendencia se han licuado, nos aproximamos a una "moda líquida", como la modernidad de Bauman.


Y todo esto viene a que lo que hoy en día lo que está de moda es ser gay. O tener un amigo gay. Y si no lo eres o no lo tienes, pues te vas a la fiesta del Orgullo Gay y pista.

 
No soy homófoba. Simplemente nunca he entendido por qué una persona ha de hacer pública su condición sexual. Está claro que hay momentos en los que es necesario, como ligar si no? Pero lo que no es relevante es hacerlo público en el sentido de gritarlo a los cuatro vientos. Cada vez que oigo a un gay lo difícil que es su vida, lo que le discriminan, lo que me pregunto es: mis profesores saben que yo soy heterosexual? lo saben los jefes que he tenido? lo sabe mi vecino del 5º? Y la respuesta será que sí o que no, pero no soy yo quien va pegando carteles sobre mis preferencias sexuales.

Cada vez que una persona me ha dicho que es gay he pensado que me importaba tanto como el nombre de su gato... Recuerdo un momento en el que un amigo nos reunió a todos y nos "confesó" su homosexualidad. Nos quedamos todos a cuadros. Creo que la primera respuesta que obtuvo fue: "y qué?". Y es que nos daba igual. Me da igual que mis amigos se acuesten con hombres o con mujeres, que le vayan las morenas o los pelirrojos.

Y creo que si de verdad han sentido alguna vez discriminación, la fiesta del orgullo gay no les ayuda mucho, porque extiende la idea de los homosexuales como reinas con boas y risa estridente. Me da pena oir a una señora mayor decir "he conocido a tal chico que es gay y resulta que es muy normal". Me da pena porque creo que no se hacen ningún favor a sí mismos pregonando una fiesta de plumas, literalmente hablando.

Para terminar quiero invitaros a participar en la fiesta del orgullo heterosexual. Se lo inventó una amiga hace unos años y creo que se tenía que celebrar el primer sábado de agosto. Consiste en hacer el amor con tu pareja. Punto. Sin plumas. Ni maquillaje. Ni alcohol. Ni nada. 

Sólo amor. Porque al final... es lo único que importa.

4 comentarios:

  1. La verdad es que creo que tienes razón en alguna de las cosas que dices.
    Mi opinión es que la condición homosexual ha estado siempre mal vista a lo largo de nuestra Historia, incluso ha sido considerada como una enfermedad. Al igual que la mujer ha sido considerada un ser inferior al hombre que no tenía ni siquiera derecho al voto, y nuestras antecesoras tuvieron que luchar y alzar la voz por la igualdad, creo que los gays también deben hacerlo. Y por ello y para ello han creado este movimiento del Orgullo gay.
    Por otra parte a mi también me parecen excesivas y algo estúpidas algunas actitudes que algunos de ellos y ellas tienen. Como en algún caso que he conocido a gente que se presenta : "Hola soy gay y me llamo Cristian...", pues le agradezco la información pero lo agradecería más si me lo comunicase cuando viniera a cuento.
    Cómo tu has dicho, puede que la figura típica del tío con la boa y en calzoncillos paqueteros, que es el icono que aparece en nuestras mentes y en las noticias cada vez que oímos hablar del orgullo, haga daño a lo que debería ser una normalización de la homosexualidad y provoque un estereotipo de "Gay= loco, excéntrico y poco caval". Pero en la manifestación del orgullo creo que hay cabida para todo el mundo, incluso para heterosexuales. Luego cada uno lo expresa de la forma que quiere, supongo. Yo soy de la opinión de que mientras no hagan daño a nadie, que cada uno haga lo que quiera.
    Un besazo y enhorabuena por tu blog.

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  2. Me alegro de que hayas entendido que lo he dicho desde el respeto, esta claro que cada uno puede hacer lo que quiera mientras no haga daño a los demás, cada uno puede realizarse como quiera.
    Lo que creo es que igual que las mujeres se levantaron para exigir sus derechos, ellos hicieron bien en hacerlo, pero igual que me parece mal la discriminación positiva hacia las mujeres, me parece excesivo el necesitar de una fiesta que dura una semana para reivindicar sus derechos. Creo que la fiesta se ha desvirtuado, que en su día sirvió para obligar a la sociedad a aceptarlos y que eso ya ha pasado, que la fiesta se ha desvirtuado y que hoy en día sólo es eso, fiesta y más fiesta.
    Creo que ahora corren el riesgo de autoplegarse sobre una especie de nicho social cercano a un "estas conmigo o estas contra mi" y eso es lo que no me gustaría que se llegara a dar. Igual que espero que NUNCA me contraten por ser mujer.

    La igualdad no es que "trates" por igual a una mujer o a un gay, la igualdad es que te de igual que lo que tengas enfrente sea hombre, mujer, homo o hetero, porque lo que tienes delante es, simplemente, una persona.

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  3. Que no habla de Grey y que no habla de publicidad =) jajjaja

    En el fondo son todo etiquetas sociales que en algún momento cumplieron un objetivo, ya fuera funcional o discriminatorio.

    Pero hoy en día... no creo que sea necesario seguir poniéndolas.

    El mayor problema es que el ser humano es inseguro por naturaleza y necesita reafirmarse en elementos "de referencia", elementos sólidos que comparta con un grupo social concreto y real. Un elemento que aun siendo parte de sí mismo lo pueda extrapolar y convertir en una característica de pertenencia social.

    No digo que las personas homosexuales sean inseguras, digo que TODOS lo somos, y todos necesitamos definirnos. Unos lo hacen por su profesión, otrosl por sus hobbies o habilidades y otros por su orientación sexual. Todos lo hacemos, y aunque nuestro instinto de supervivencia social diga que es necesario, una vez hayamos descubierto nuestras propias etiquetas deberíamos cortárnorlas, guardarlas en un cajón (que no digo renunciar a ellas) y hacernos valer como personas. Sin más

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  4. En eso tienes razón. Es posible que en algún momento de nuestras vidas todos necesitemos, como nos dicen en RRPP, un grupo de pertenencia. Pero yo creo que con el paso del tiempo lo que se llama "grupo de pertenencia" debería pasar a un segundo plano y convertirse en "grupo de referencia". Ya sé que son dos cosas distintas...

    Pero es que esto es como cuando tienes catorce años y eres el más heavy de los heavys, que vas dando el cante con vaqueros rotos, greñas, botas newrock y camisetas cutres de grupos y pulseras de pinchos. Al final, están las personas que maduran, que siguen escuchando su música, tocando su guitarra, pero son personas normales... y los que van por ahí con cuarenta tacos disfrazados con traje de chaqueta para currar y vestidos de preadolescentes metaleros por las noches...

    No sé. Me parece perfecto que nos autodefinamos según gustos y etiquetas, en eso tienes toda la razón del mundo, todos las necesitamos. Pero, como tú misma has dicho, llega un momento en el que tenemos que dejar las cosas atrás y empezar a ser personitas humanas.

    No se vive de la imagen, ni se vive de las etiquetas, aunque sean una referencia de pertenencia o aspiracional, no sé por qué demonios se empeñan todos en ser calcos del mismo patrón. Yo no podría encajarme a propósito en un molde específico, aunque luego resulte que desde fuera encajo xD

    Ya no sé si me explico.

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