domingo, 29 de mayo de 2011

Todo tiene un lado bueno. Pero todo tiene un lado malo.

La mayoría de la gente vive su vida sin preguntarse de dónde viene el saber por qué es como es. Sin preguntarse por qué usamos una moneda como medio de intercambio como evolución del trueque, porque trabajamos con divisón del trabajo, física y social, etc.

Y no nos lo preguntamos porque estamos muy calentitos en nuestro sofá. O muy adisgusto en nuestro trabajo. O sin más ni más pasamos cada día de esta larga y muchas veces gris vida. Pero los colores del arcoiris que todos nos enforzamos por ver en nuestras vidas (eso o la simple pereza mental), nos impiden pensar en qué es lo que hace que el capitalismo funcione. Cuál es el motor que hace que algo se potencie o que algo se ignore. 

No es el interés común del grupo (social) de Ron Howard, aunque puede serlo si es el de uno...
No es lo que mejor le venga a la sociedad, aunque puede si es lo que le viene bien a uno ..

Quiero decir que lo que se hará, investigará, desarrollará, creará, fundamentará... Es lo que el dinero diga que hay que hacerlo, el dinero y quien este detrás de él.

Por eso en la sociedad capitalista, sino hay dinero, no hay nada más. ¿Que no es así? Piensa en cualquier buena o mala obra, empresa, acción social, o lo que te apetezca y piensa. Sí, es probable que muchas de ellas hayan surgido por el empeño personal de algunas personas, pero también lo han hecho porque el capital económico existía, o no?

Ahora se dice que se puede haber descubierto la cura del cáncer, pero que como es a partir de una sustancia de la que no se puede hacer patente, no se puede obtener lucro, por lo que puede que no se siga investigando y desarrollando, lo que implica que no "vería la luz" y lo más importante, a mi modo de ver, no se terminaría de estudiar para poder implantarlo, aunque sea en el sistema sanitario privado.


Enlace al artículo original de la revista científica British Journal of Cancer. 
Enlace al artículo en español de la Vanguardia.

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